La célebre prisión de Longfort se cerró y selló hace doscientos años.
Desgraciadamente, nadie se molestó en decírselo a los internos, por lo
que fueron enterrados vivos... Pero después de dos siglos de silencio,
en sus pasillos vuelve a oírse el sonido de unos pasos. Hasta Longfort
llega un equipo de especialistas dispuestos a resolver algunos
misterios, como saber el por qué la prisión fue sellada y los internos
dejados a ese horrible destino: una muerte lenta por la sed y el hambre.
Aquellos que dieron las órdenes hace tiempo que están muertos... pero
pronto los desventurados científicos descubrirán que algunas cosas es
mejor dejarlas enterradas...
De esos film que no se explica uno como ven la luz. Dirigido por David DeCoteau, quien realiza un trabajo horrible.
Del reparto por citar algo, nombrar a Alicia Arden y Debra Mayer.
Film horrible en todos los sentidos, para formatear de la memoria.
PUNTUACIÓN : @
No hay comentarios:
Publicar un comentario